Cómo pintar con lápices acuarelables
Papelería Distrimar

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Dibujar y pintar son dos actividades que ayudan a nuestra mente a desconectarse de las preocupaciones diarias, como pueden ser el los estudios o el mismo trabajo.Mientras nos centramos en nuestra obra conseguimos relajarnos; quizá por eso este sea un hobby que atrae cada vez a más gente.
Existen muchas formas de pintar, pero en esta ocasión nos vamos a centrar en cómo pintar con lápices acuarelables, una técnica que cada día más gente utilizar en su día día en el ámbito artístico/didáctico.
¿Qué son los lápices de colores acuarelables?
A simple vista es un lápiz de colores normal y corriente, pero en realidad nos permite imitar la técnica de la acuarela sin necesidad de usar la técnica clásica. Lo que hace que sea una buena forma de iniciarse en la pintura con acuarelas.
Se pueden usar en seco o en mojado, aunque no es aconsejable mojar la punta del lapicero. Lo mejor es usar un pincel húmedo sobre la parte del dibujo que hemos pintado con el lápiz acuarelable.
Existen también los rotuladores acuarelables. A diferencia de los rotuladores normales, tienen una punta en forma de pincel elaborada a base de fieltro que es resistente y flexible. Esto permite hacer trazos que pueden ser muy finos o más gruesos según la presión ejercida. Son muy prácticos tanto para pintar como para hacer caligrafía.
¿Cómo empezar a pintar con pinturas acuarelables?
Antes de trabajar con este material es importante elegir muy bien el soporte. Lo mejor en estos casos es utilizar un buen papel para acuarela, que sea poroso y de alto gramaje, puesto que así absorberán mejor el agua y no corremos el riesgo de que nuestra obra se estropee. Por supuesto necesitaremos lápices acuarelables, en nuestra papeleria online dispones de un amplio surtido con gran variedad de marcas y calidades.
Como hemos señalado antes, no debes mojar la punta de los lapiceros, ya que eso puede hacer que se desgasten más rápido y se estropeen. Trátalos como si fueran pinturas normales y corrientes.
Aplica color sobre el dibujo (puedes variar la intensidad del trazo, tanto si buscas un tono más liviano o uno más intenso). Después humedece un pincel con un poco de agua y aplícalo sobre el color, notarás que adopta la estética propia de la acuarela.
También tienes la opción de hacer un dibujo con acuarela siguiendo la técnica tradicional y añadir después algunos toques con pinturas acuarelables. Esta técnica es perfecta para añadir pequeños detalles y dibujar líneas finas, algo que es muy complicado conseguir con la acuarela clásica.
Otra alternativa interesante es usar la técnica del lijado. Consigue una lija de grano fino y frota un poco la punta del lápiz. Aplica el polvo conseguido sobre las zonas que quieras colorear, moja un pincel en agua y pásalo por toda la superficie coloreada.
La técnica del lijado mixto es similar, pero en este caso lo que hacemos es mezclar las virutas de varios lápices acuarelables para conseguir un resultado único.
Al principio es perfectamente normal que tardes un poco en obtener el resultado que estás buscando. Lo que te aconsejamos en estos casos es que antes de ponerle color a tu obra hagas algunas pruebas en un papel que no te sirva para ver si el resultado será el que tú quieres.
¿Cómo se crean capas de color?
Crear capas de color es una técnica bastante habitual cuando se trabaja con acuarelas y también se puede lograr con estos lápices.
En este caso usa la pintura con poca intensidad de trazo en las zonas que quieras ver más claras y con más intensidad en las zonas que quieras más coloreadas. A continuación pasa un pincel humedecido primero por las zonas más claras y luego por las más oscuras (así evitas la transferencia de color).
¿Se puede usar líquido enmascarador?
Los lápices de colores acuarelables son totalmente compatibles con el líquido enmascarador. Aplícalo sobre aquellas partes de tu obra que quieres asegurarte que estén en blanco y así no correrás el riesgo de que se manchen mientras trabajas con los lápices.
Eso sí, ten en cuenta que este producto se seca muy rápido y resulta difícil de eliminar de los pinceles, así que te aconsejamos que uses un pincel que solo utilizarás para el enmascarador. Inmediatamente después de usarlo limpia las cerdas con ayuda de una pastilla de jabón humedecida.
Una buena alternativa para los niños
Los lápices acuarelables son una buena opción para los adultos que quieren iniciarse en el mundo de las acuarelas o que quieren mejorar su técnica, pero también lo son para los niños. Gracias a su sencillez de uso son buenos para que se interesen por el mundo del arte y puedan empezar a desarrollar su talento artístico.
Se lo pasarán genial, apenas manchan y verás como poco a poco van desarrollando habilidades que les permitirán en un futuro pasar a otras formas de pintura.
Para finalizar, compartimos contigo este práctico tutorial en el que puedes aprender mucho más sobre cómo usar los lápices acuarelables y algunas de las técnicas.
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